09 abril 2009

LOS ACUERDOS DEL G-20

El mundo ha recibido una respuesta esperanzadora de la reunión de los líderes mundiales que conforman el G-20, tratando de tomar medidas que puedan paliar medianamente la crisis económica global.

El mayor beneficiado del consenso de los dignatarios ha sido el FMI, al acordar un aporte ascendente a 500,000 millones de dólares en recursos frescos para elevar a la suma de 750,000 millones los fondos disponibles por ese organismo internacional para acudir en ayuda de los países en desarrollo.

Otras de las medidas adoptadas fue la creación de un nuevo “Comité de Estabilidad Financiera” que trabajará junto con el FMI en la supervisión del Sistema Financiero Global para identificar riesgos económicos y financieros.

Entre los compromisos del G-20 figura también el fortalecimiento del comercio, estableciendo un aporte de 250,000 millones de dólares adicionales a los 50,000 millones de dólares que el Banco Mundial había anunciado para impulsar los flujos mundiales y respaldar la actividad comercial.

Sin embargo, desde el comité ejecutivo del Banco Central Europeo (BCE) se han calificado las medidas como puras inyecciones de liquidez a los mercados o creación de dinero como “dinero helicóptero”, catalogación utilizada para describir los aumentos de cantidad de dinero en el sistema bancario, causando una enorme preocupación por el efecto inflacionario de estas medidas.

Pero otro de los puntos más preponderante fue la declaración de guerra contra los paraísos fiscales, encomendando a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) revelar la lista de los paraísos fiscales en el mundo.

En principio aparecieron en la “lista negra” de paraísos fiscales: Uruguay, Costa Rica, Filipinas y Malasia, pero hace apenas horas fueron excluídos de la misma, pasando a formar parte de las listas grises de la OCDE.

En las listas grises de paraísos fiscales aparecen Andorra, Anguila, Antigua y Barbuda, Aruba, Bahamas, Bahrein, Belice, Bermuda, Islas Vírgenes Británicas, Islas Caymán, Islas Cook, Dominica, Gibraltar, Grenada, Liberia, Liechtenstein, Islas Marshall, Mónaco, Montserrat, Nauru, Antillas Holandesas, Niue, Panamá, Saint Kitts y Nevis, Santa Lucía, San Vicente y Granadinas, Samoa, San Marino, Islas Turks y Caicos y Vanuatu.

La humanidad se mantiene a la expectativa de los efectos de todas estas medidas, con la esperanza de que podemos mitigar las laceraciones a la economía mundial que ha provocado esta crisis mundial.