18 septiembre 2008

CRISIS BOLIVIANA


Los acontecimientos que desde hace un mes se vienen suscitando en Bolivia son de profunda preocupación para la comunidad internacional.

La historia de vicisitudes y calamidades continúa en Bolivia. Esta es la nación sudamericana que más territorios ha perdido en la historia del continente, siendo más de la mitad de su área original anexada por sus 5 vecinos.

Ahora se presenta una ruptura a lo interno, que conllevaría desmembrar la nación en parcelas autónomas, cuando las principales prefecturas han decidido escindirse, lo que dejaría a La Paz con la hegemonía política, pero prácticamente sin capacidad económica.

La situación se fue agravando de forma tal que hubo bloqueos, toma de instalaciones petroleras, choques entre civiles, decenas de heridos y más de 30 muertos. El presidente Evo Morales denunció un golpe de estado y a la vez declaró “persona non grata” al embajador de Estados Unidos.

Ante una prolongada crisis institucional, económica y social que llevó al país andino al borde de la quiebra general Evo Morales asumió la Presidencia de Bolivia en el 2006, con ambiciosos planes de refundir el Estado boliviano.

Esta postura de Morales ha ido causando roces internos en los diversos sectores empresariales de la nación, hasta el punto de que todas las prefecturas de alzaran en busca de separación del gobierno boliviano.

Como una forma de reducir las tensiones, hace unos días los autonomistas, representados por el prefecto de Tarija, Mario Cossío, y el gobierno de Evo Morales firmaron un acuerdo de pacificación del país e iniciaron una negociación para un pacto nacional".

El documento establece la suspensión de los bloqueos de autonomistas y oficialistas, la devolución al gobierno de instituciones públicas y petroleras que fueron tomadas por grupos cívicos y la suspensión por un mes de la convocatoria al referendo de aprobación de la Constitución Política del Estado.


Por su parte, los 9 mandatarios que conforman la recién creada Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) se reunieron en Chile, y dieron su respaldo a la democracia boliviana, a lo cual se unió el presidente Leonel Fernández mediante un comunicado.Nos queda la esperanza de que el pueblo boliviano pueda resolver la polarización y la convulsión política y social que desde hace tiempo le aqueja y que pueda solucionar sus problemas internos por la vía democrática y constitucional.